La gestión de nuestro propio talento
Los activos de una persona son sus conocimientos, competencias, actitudes y sistema de creencias. Nuestras capacidades y talentos pierden valor si no son constantemente puestos al día y/o reciclados. La mejora del conocimiento tiene tres grandes enemigos: la complacencia, la falta de rigor, y la dispersión. Cada uno de estos tres enemigos influye de gran manera en el proceso de pérdida