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Ocupo una posición técnica en una organización tecnológica. Las cosas iban bien hasta que ha llegado un nuevo jefe en nuestro departamento. Se trata de una persona difícil con la que no he conseguido conectar. ¿Me puede dar alguna orientación? Joan P.  (Barcelona)

Conocer la forma de ser de tu jefe puede ser el principio para llevarte bien con él. Pero averiguar qué opina de tu trabajo y de ti como profesional es la mejor opción para mejorar tu carrera. Soy de los que pienso que una buena relación con tu superior es a menudo uno de los aspectos claves para el desarrollo de una carrera de éxito.

No obstante, a menudo, hay personas difíciles con las que no encajamos. Y en este caso disponer de un feedback sobre nuestro trabajo es aún más difícil. Aunque la mayoría de las personas reniegan de los superiores que actúan con criterio y que transmiten sus sentimientos y percepciones (incluidas la valoración del trabajo y de los resultados alcanzados por sus subordinados) no admitimos y cuestionamos, sin embargo, a aquellos que no dan ningún tipo de apoyo.

No eres el único caso. Has de tener la certeza que muchos de los cambios, promovidos por profesionales como tú, se producen simplemente por la falta de comunicación con los supervisores. De igual forma son muchos los que reconocen la influencia (en algunos casos positiva y en otros negativa) que ha tenido en su trayectoria profesional la mala experiencia con un jefe en los inicios de su carrera.

Aunque existen muchos superiores con evidentes límites en su capacidad de liderazgo ello no ha de ser óbice para que un subordinado “enseñe a su jefe” y de hecho se dé la existencia de muchas organizaciones que están trabajando para mejorar estas relaciones.

Dicho esto he aquí algunas consideraciones que creo que deberías de tomar en consideración:

Si preguntas qué puedes hacer para mejorar un proyecto, manifiestas tu interés en mejorar. Hay formas de lograr que un jefe reticente hable. Reconocer sin tapujos que tienes debilidades puede facilitar que tu jefe (que finalmente es una persona que tiene sus miedos, fobias y dudas como tú) adquiera la confianza contigo para ser claro y darte un feed-back objetivo.

Haz preguntas de forma sutil, que sugiera que sabes que hay margen para mejorar, Preguntar «¿usted qué haría diferente?» o «¿cómo cree que podría mejorar esto?» muestra que eres consciente de que un proyecto no es perfecto, dice el experto. Por ejemplo ¿qué se necesita para que esto lo emocione?» refleja un interés genuino en el punto de vista del jefe.

Enlaza tu petición con los objetivos del jefe o de la organización, si es posible. Esto hará que él reduzca sus reticencias y miedos y que se sienta más inclinado a ayudarte. Casi todos quieren ser vistos como consistentes en el cumplimiento de metas acordadas. También es bueno no sólo pensar en tus propios objetivos sino en los suyos.  «Ya no se trata sólo de ti”.

Reconoce sin tapujos tus carencias facilitará que tu jefe, probablemente, se sienta más seguro ante tí. Piensa que el fondo él puede incluso tener reticencias a que tu propio desarrollo y éxito condicione de forma negativa su trayectoria futura en la organización.

Mantén una expresión calmada y neutral incluso si piensas que la retroalimentación está equivocada. Si el jefe recurre a clichés, como que no trabajas en equipo, pide explicaciones. Algunas veces ayuda ser específico sobre los comentarios que han resultado útiles en el pasado.

Se agradecido. Agradece cualquier tipo de comentario que recibas. Incluso si piensas que son mezquinos o desfasados, reconoce lo difícil que debió ser para él compartir eso. Piensa que probablemente él está pasando por momentos difíciles, con una presión importante. Si eres agradecido es posible que tu superior pueda devolverte más adelante el favor.

Joan… espero haberte aportado valor.