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Acabo de perder mi empleo como consecuencia de una reestructuración. Hace 5 años también me vi implicado en un proceso similar. Soy consciente de que todo esto es un handicap. ¿Cómo debo de tratar este tema en mi búsqueda?. Joan M (Barcelona)

De entrada te ruego tomes nota del del título que he puesto a esta nota. En según lugar es importante señalar que en los tiempos actuales tu situación es mucho más común de lo que crees. Hoy hablar de ética parece una idea anticuada. Sin embargo, todo profesional en búsqueda, debe de tomarla en consideración.

Lo que te propongo es que tomes en cuenta las ideas siguientes:

Has de ser claro y franco. Hoy todo el mundo es plenamente consciente de que las causas de pérdida de empleo son en la gran mayoría de casos, fruto de variables que no están bajo en control de los candidatos. En todo caso debes inclusive de poner en valor el hecho de que aunque perdiste tu empleo volviste rápidamente a estar ocupado de nuevo. De la misma forma evita “estirar” de la verdad, representarse con conocimientos que no posee (profesionales, académicos, de informática o idiomas, etc.).

Se consciente que con algunos “adornos”, “fechas ficticias y no ajustadas a la realidad” y otras variables “creativas” es posible que logres pasar por el primer filtro, pero es sumamente probable que sean detectadas en pasos posteriores. Las pruebas utilizadas en los procesos de selección y el hecho de que muchos entrevistadores contrastan la información que figura en tu CV, hace que el índice de probabilidad de ser descubierto sean muy elevadas, con el riesgo de perder toda tu credibilidad ante tu interlocutor y en consecuencia ser descartado del proceso.

Si has falseado o introducido variables no adecuadas en tu CV con casi toda seguridad te desmontarán en la entrevista. En cambio si has hecho una representación fiel de ti mismo en su CV, (inclusive explicando las razones de tu anterior fracaso y el hecho de que conseguiste rápidamente un nuevo empleo) superar la entrevista no será, en este punto, una dificultad.

“Hacer teatro” no funciona. Te invito a hacer la siguiente prueba: pídele a tu pareja o a un amigo que te grabe una entrevista simulada en la que mantienes y argumentas lo que no ha ocurrido y visualízala. Te aseguro que la prueba será contundente. Todo ello no evita que debas de prepararte para responder a las preguntas difíciles y trazar las líneas generales de tu argumentación, aunque esto no quiere decir “memorizar” respuestas (perderás naturalidad y esto actuará en tu contra).

Piensa que es probable que hoy, por la situación de mercado, debas de cambiar tus objetivos profesionales. Probablemente es el momento de dar un giro radical a tu trayectoria. En algún lugar hay seguro una oportunidad para tí.

Joan, te agradezco la confianza que depositas en mí.