Estoy promoviendo un cambio profesional y percibo que las cosas que hice hace 10 años hoy ya no funcionan. Más que los cambios en el mercado influye sobre todo mi edad. He leído cosas sobre el concepto de marca personal. Tras el análisis de mi perfil, ¿me puede orientar? Lucas M. (Madrid)
De entrada confirmarte que estas en lo cierto cuando tú mismo constatas que con el paso del tiempo algunos de los criterios en materia de reclutamiento y selección de candidatos se han modificado. Sin embargo los elementos sustanciales no cambian, aunque tu edad no sea la misma y por tanto ha cambiado la atracción que generas en determinados entornos.
El mercado de trabajo sigue estando integrado por una serie de personas que ofrecen sus servicios profesionales a unas compañías que están interesados en contratarles para que les ayuden a conseguir sus objetivos.
Los cambios fundamentales que se han producido en estos 10 años derivan tanto de la crisis económica que ha hecho que muchas compañías hayan decidido externalizar muchos de sus procesos, como de la puesta en marcha de los procesos de los procesos de digitalización, robotización etc como consecuencia de la innovación tecnológica.
En todo caso conceptos como el de marca personal, empleabilidad etc eran probablemente menos conocidos hace unos años. Sin embargo se trata simplemente de adaptaciones de conceptos anteriores. Una buena imagen profesional aumenta considerablemente tus posibilidades de contratación, pero no te asegura nada de forma permanente ni te convierte en un profesional irremplazable. Este principio es “universal” y vigente desde la revolución industrial sin embargo lo que puede ser novedoso es que a esta imagen se le denomine hoy “marca personal”.
Hagamos un pequeño ejercicio de reflexión: Si tuvieras que elegir a un profesional para un puesto en tu empresa, ¿a quién escogerías, a un profesional de referencia en tu sector o a un cualquiera? Y si ese ‘cualquiera’ tuviera las habilidades y aptitudes idóneas para tu compañía, ¿todavía dudarías? Seguramente sí, porque como afirma Guillem Recolons (uno de los pioneros del concepto de marca personal en España) “contar con una marca personal potente no te garantiza nada pero sí hace que aumenten las opciones de ser el candidato elegido”.
En otras palabras y siguiendo a Andrés Perez Ortega «Cuando hay varias alternativas o distintos perfiles similares, aquellos que han conseguido ser conocidos y reconocidos (es decir, cuando se asocian sus nombres a un trabajo bien hecho), estarán mejor situados que quienes no son referentes en su sector, materia o empresa».
Existen muchas herramientas que pueden ayudarte a crear tu marca. Sin embargo la que me propongo destacarte hoy es la que supone el posicionamiento en las redes sociales. Una herramienta que se convierte en vital como consecuencia del uso que de ella están haciendo la mayoría de los seleccionadores en sus procesos de reclutamiento de candidatos.
Has de tener en cuenta que un buen posicionamiento en las redes sociales puede dar a tu perfil profesional una difusión que hace 10 años resultaba imposible. Un buen perfil en las redes te va a permitir demostrar tu experiencia profesional, los conocimientos que has adquirido, las competencias que has desarrollado y los resultados que has alcanzado. Piensa que, por tu edad, estás en cualquier caso en una posición límite… ¡ahora o nunca!
Sin embargo no creas que trabajar en este ámbito genere resultados a corto plazo (salvo excepciones que confirman la regla general), Crear y mantener tu marca personal no es una tarea fácil, que debe fundarse en la consecución de resultados en el puesto que ocupas actualmente, la humildad, la honestidad y la veracidad.
Sé consciente de que los peores enemigos de tu marca personal serán la mentira y la falta de coherencia.
Muchas gracias Lucas por confiar en mí.
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