Tiempo de lectura: 3 minutos

Una de las primeras cosas que aprendí, en los inicios de mi trayectoria en Orientación Profesional es la de que si un candidato sólo tiene 2 minutos para captar la atención de su interlocutor.

Y aún debería de sobrarle algún tiempo. 

La segunda que aprendí es la de que un reclutador no dedica más de estos dos minutos a analizar un Curriculum.  Por ello es clave que intentemos concentrar toda la información relevante para poder ser leída y evaluada en este tiempo, (en otras palabras, no ocupar más de 2 páginas).

Sí, 2 páginas como máximo aunque hayamos ocupado 6 empleos diferentes, tengamos dos licenciaturas y un master. Después de un largo periodo profesional leyendo, revisando y asesorando sobre CVs, no he hallado ninguno que no pueda reducirse a este tamaño. Nada más cierto en este caso que el axioma lo bueno si breve, dos veces bueno.

Una vez hayas eliminado repeticiones, adjetivos superfluos y redundancias, lo que resta es comunicación. Cualquiera que tenga que leer gran cantidad de correspondencia agradecerá un texto breve, claro, y directo comparado con la resistencia que produce un documento de tres o más páginas.

Aunque no está documentado científicamente, la mayor parte de los expertos en reclutamiento coinciden en que un currículum de dos páginas reduce la retención de información en un 25 o 30%. En los currículos de tres páginas, esta pérdida aumenta hasta un 50%. También existe un consenso en el sentido de que son los candidatos con menos posibilidades, los más inseguros, los que suelen presentar un currículum extenso.

A partir de aquí algunas consideraciones sobre las que he escrito en múltiples ocasiones pero en las que conviene siempre recalcar:

  1. Acortar las oraciones y eliminar las frases inacabables: Por ejemplo, la frase: ”yo era la persona seleccionada para coordinar el trabajo del equipo de recaudación de fondos en la universidad para la semana después de vacaciones” puede sustituirse por ”coordiné el trabajo del equipo de recaudación de fondos de la universidad”.
  2. Eliminar las repeticiones: Si realizaste tareas semejantes en dos o tres trabajos diferentes, exponer detalladamente sólo lo que concierne al último puesto.
  3. Evitar las redundancias: No detalles información que ya está implícita o incluida en otra información. Si eres licenciado, no hay razón para indicar que posees el graduado escolar.
  4. Indicar sólo los empleos o puestos más recientes: Si has desempeñado puestos similares puedes resumirlos de la siguiente forma «“1985-2000, ocupo varias posiciones en el área comercial”.
  5. Omitir lo inncesario: Ejemplo: las direcciones de empresas y las referencias (puedes proporcionarlos en la entrevista). Tampoco tienes que señalar “puedo proporcionar referencias”. Se sobreentiende.
  6. Eliminar información que no aporta valor:. Los reclutadores no necesitan saber tu peso, altura, salud, nombres de los hijos, clubes o asociaciones a los que pertenece (salvo sí alguna de estas informaciones fuera relevante para el contexto o puesto al que optas). Ya tendrás tiempo de proporcionar esta información…
  7. Ser breve. No facilites tres ejemplos cuando uno es suficiente.
  8. Centrar el mensaje en los logros (valor añadido). Olvídate de los puestos y de las funciones. Detalla en una frase el logro más relevante para cada uno de los puestos. Ejemplo: Conseguí reducir en un 20% el ratio de devoluciones.
  9. Destacar lo importante. Utiliza la negrita o cualquier otro sistema significativo que te permita resaltar aquello en lo que quieres captar la atención del reclutador.
  10. Tomar consciencia de que el CV sirve para rechazar. El proceso mental del reclutador al analizar tu CV (en la fase inicial del proceso) es el de rechazar a todos aquellos candidatos que no cumplan los requisitos del puesto. Ten esto muy en cuenta mostrándote siempre como el candidato ideal.

Y esta es la razón básica por la que un CV debe de adaptarse siempre a los requisitos explícitos o implícitos de la oferta 

Para terminar, aunque ya figuran incorporadas en otros post de este blog y con el objeto de contestar directamente a la pregunta que titula este comentario, he aquí las preguntas claves que debemos de formular a nuestro CV:

  • ¿Está formulado en oraciones y párrafos breves? (ninguno de más de 4/5 líneas).
  • ¿Usa términos simples en vez de expresiones complejas?.
  • ¿Evita los tecnicismos?. Recuerda que todos deben entenderte.
  • ¿Utiliza cantidades, sumas y valores? con el objeto de destacar tus logros.
  • ¿Ha eliminado cualquier referencia al pronombre “yo”?. Está implícito.
  • ¿Esta redactado en términos positivos?
  • ¿Es realista?

Es posible que en 3/5 años el CV (por lo menos en el formato tradicional que conocemos) desaparezca sustituido por otros elementos «digitales» pero mientras tanto….