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He estado hoy en Madrid. A pesar de que muchos colegas siguen con el avión o el puento aéreo yo no dejo de insistir en que en mucho mejor y mucho menos «estresante» el viaje en ferrocarril.

Por mi parte sólo he tenido un problema en los dos años en los que me he hecho «aveadicto» como fué el que se produjo recientemente por el fuego de Guadalajara del mes de julio pasado. He podido preparar la reunión de socios de Grupo Especialistas en la ida, y he estado finalizando algunas lecturas que tenía pendientes a la vuelta.

A las 21,30 estaba cenando con mi familia en el restaurante Daps de Barcelona.