Tiempo de lectura: 3 minutos

Aunque a muchos les parezca que todavía falta algún tiempo, aunque a algunos le de miedo y a otros prevención, el software del futuro ya esta aquí. Y este software no es otro que el basado en la red, es decir lo que muchos llaman de muchas maneras y yo, dentro de mi ignorancia en estas materias, he aprendido a denominar SaaS.

Estoy plenamente convencido de que, en los próximos años, estas aplicaciones terminarán sustituyendo a los ERPs corporativos que no dejan de ser soluciones individuales, poco flexibles, poco amigables, con altos costes de implantación y modificación y que además, aunque muchos no lo acepten todavía, pueden inclusive plantear poca fiabilidad desde el punto de vista de la seguridad.

Como muchos de vosotros sabeís los dos últimos años me he dedicado fundamentalmente a diseñar, elaborar y presentar al mercado las soluciones que en este ámbito estamos desarrollando y comercializando en GRUPO ESPECIALISTAS. Tan solo significaros, que tras haber entrado en contacto con más de 160 organizaciones, incluidas dentro del concepto de “multinacionales españolas” (empresas con sede en nuestro país y de una dimensión superior a más de 1.000 empleados), la mayoría inmersas a pesar de la crisis, en procesos de implantación de tecnología en la gestión de los RRHH, he llegado al convencimiento que muchas de ellas están ya planteándose alternativas SaaS o de “software como servicio”.

Y las razones no son otras que las siguientes: mayor rapidez y menores costes en el proceso de implantación, mayor flexibilidad, usualibilidad etc además de la importante ventaja, en estas épocas, de que las necesidades de inversión sean prácticamente nulas.Sin embargo creo necesario, en aras a dar valor a este mensaje, poner en evidencia algunos mitos o falsas verdades sobre las ofertas actualmente presentes en el mercado, (me refiero básicamente a las soluciones para RRHH), aunque evidentemente tales afirmaciones serían perfectamente aplicables a los otros ámbitos de la gestión empresarial. En primer lugar debemos destacar que existen pocas soluciones en gestión de talento, que sean realmente SaaS. Muchos se apuntan a lo nuevo y se aprovechan de la falta de conocimientos que en temas tecnológicos tenemos todos y particularmente la gente de RRHH, salvo contadas excepciones. En segundo término se ofertan “soluciones integrales” y niveles de funcionalidad que difícilmente podrían superar un análisis más somero. Por último no todo es oro lo que reluce en términos de seguridad.

También supongo que puede ser de interés hacer algunas matizaciones sobre SAP (que ha conseguido implantarse con éxito en el 95% de las empresas que he denominado “multinacionales españolas”) y que en un alto porcentaje también lo usan para la gestión transaccional de RRHH, (base de datos de empleados y nómina).  Aunque de entrada reconozco que SAP es una excelente plataforma para esta gestión transaccional y un excelente “repositorio de información”, no debemos engañarnos y olvidar que:

-SAP no es una solución integral, ni ha sido concebida ni creada para la gestión “soft” de RRHH.

-Las soluciones SAP se integran entre ellas de la misma manera que podrían integrarse soluciones de terceros, con los costes de adaptabilidad y de mantenimiento que ello puede suponer. Existen, que yo sepa, dos organizaciones en España que después de implantar todos los módulos de SAP, se han visto obligadas a contratar una nueva solución para integrar y hacer usable toda la información.

-SAP es una excelente herramienta útil para los profesionales de sistemas o de una función determinada. Me encantaría saber cuántos de vosotros que convivis con SAP realmente sois usuarios de SAP.

-Los costes de mantenimiento, adaptación y modificación de SAP son muy importantes dado que finalmente no hay una sola plataforma sino tantas como clientes. Lo que a corto plazo es un activo relevante (personalización) puede convertirse a largo plazo en una rémora fundamental en términos de adaptabilidad y costes.

Por ello, y dado que verdaderamente los procesos de RRHH, son claramente replicables con independencia del contexto, del sector, etc, es por lo que el mercado ha sido ya más receptivo a las soluciones SaaS. Muchas de las organizaciones más avanzadas en el mundo en términos de gestión de talento han abandonado SAP y se están pasando a este nuevo modelo. Consecuentemente, aunque resulte algo más complejo, me permito apostar que pronto también serán adaptadas por otras áreas de la gestión empresarial.

Para terminar un último comentario en el que voy a referirme a las redes sociales y a su uso dentro de nuestras organizaciones y empresas. Otro gran elemento que deberíamos ya ir integrando en nuestras políticas de RRHH y sobre el que pretendo referirme en un próximo mensaje.

Aunque los datos sobre el uso de las redes sociales, pueden llegar a ser en algunos casos discutibles, hay un hecho cierto: Somos el 7º país del mundo en uso de redes sociales (por tanto formando parte de lo que en otros ámbitos se denomina G8).  Vamos a ver como integramos este nuevo marco de relación y de comunicación en nuestras organizaciones. ¿Es estupido pensar que la época de los portales de empleo ha terminado cuando muchas de nuestras compañías todavía no han puesto en marcha este tipo de plataformas?