Vamos a contratar un colaborador para mi departamento. Yo seré quién tome la decisión final. Voy a tener en los próximos días las entrevistas decisivas con los 3 candidatos/as finalistas. Aunque contaré con RRHH creo que no tengo todos los elementos bajo control. Marcos L. (Madrid)
La mayoría de las consultas que se me formulan tienen que ver con la acción de un candidato en un proceso de selección. Me alegra, por tanto, tu consulta ya que me permite plantearme un escenario distinto, como es el de la perspectiva del seleccionador.
La calidad de la selección (que no olvides que finalmente es como un melón por abrir) estará en relación directa con la calidad del proceso de selección. Si habéis hecho (tu y tu departamento de RRHH) correctamente las fases previas podrás dedicarte a valorar, analizar y comparar entre tres candidatos objetivamente válidos y adaptados para el puesto. Si no deberás de dedicar la entrevista a otras tareas, habrás perdido el tiempo y…… Para evitar este riesgo creo que debes de tomar en consideración las recomendaciones siguientes:
- Las entrevistas necesitan preparación. La entrevista sólo será eficaz si como entrevistador la has preparado previamente. Debes de analizar a los candidatos, estudiar los detalles de la situación, determinar los objetivos y definir la estrategia que vas a seguir para conseguirlos.
- No te disperses. El entrevistador, no profesional, que no ha preparado la entrevista tenderá a formular preguntas intrascendentes y a abrir un dialogo sin interés con el candidato, perder el foco y no conseguir determinar su adecuación a las necesidades de la organización y su motivación para el puesto.
- Centrarse en el candidato y en el guion que hemos previamente preparado de la entrevista. Existen muchas personas que recomiendan no tomar notas en la entrevista ya que consideran que ello supone una descortesía con el entrevistado. En este punto nuestro consejo es que actúes como te parezca más conveniente. Puedes tomar notas durante la entrevista o hacer un resumen al final de la misma. En cualquier caso disponer de un guion sobre los temas a tratar y que te permitan una valoración posterior resulta muy conveniente.
- No formules falsas preguntas. Se trata de no formular preguntas que induzcan a una determinada respuesta o en las que la respuesta está ya planteada en la propia pregunta. Haz las preguntas según el guion que hayas preparado previamente y espera las respuestas del candidato.
- Evitar las pérdidas de tiempo. Tu tiempo es muy valioso y el del candidato también. Sin embargo toma en consideración que eres tu quien debes de dirigir la conversación. Saber escuchar, servirse del silencio es difícil pero siempre conviene que sea el candidato el primero en romperlo.
- No actúes con prejuicios y estereotipos. Como profesional no debes dejarse llevar por esteriotipos como: aspecto, sexo etc.
- No formules preguntas teóricas. Todas las preguntas y el contenido de la conversación deben ser dirigidas hacia áreas específicas: conocimiento del candidato, su comportamiento, su trayectoria profesional, logros etc. Intenta ser lo más concreto posible. Formula todas las cuestiones que consideras van a tener relevancia para la decisión final. A fin de cuentas tú te la “juegas” tanto en la entrevista como el propio candidato.
- Evitar el efecto soledad. Denominamos efecto soledad a la actitud de un entrevistador de responder a sus propias preguntas.
Si sigues estas orientaciones y te apoyas en RRHH tus posibilidades de éxito se van a maximizar.
¡Mucha suerte!
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