Soy de los que siempre ha creído que los aspectos retributivos no explican nunca -por sí solos- el abandono de una organización.
Evidentemente, el tema económico es ‘una razón de peso’ que puede motivar el cambio profesional pero no pasa de esa categoría.
Por contra, sí que hay razones mucho más decisivas que el dinero a la hora de optar por el abandono de la organización. Por ejemplo:
- – Voluntad de conocer o experimentar nuevos entornos.
- – Ser mejor valorado en otro entorno.
- – Falta de apoyo.
- – Agotamiento y estrés.
Eso sí, en todo caso, estas razones están unidas a la existencia de otra oferta profesional porque, en caso contrario, sólo los ‘locos’abandonan las organizaciones.
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