Afirma Alicia Pomares en un post publicado en su blog que “cada vez estamos más conectados a la redes y explicamos más cosas de nosotros mismos, dejamos más huella en este mundo digitalizado y, por ese motivo, el volumen de datos recolectados y procesados cada vez es mayor”.
El avance de las soluciones tecnológicas, la capacidad de almacenamiento de datos, la digitalización de la sociedad, y el hecho de que todos tengamos a nuestro lado (y casi de forma permanente) un dispositivo electrónico, permite que la cantidad de información disponible, en todos los ámbitos, haya crecido de forma ingente y que hoy sea posible para las organizaciones disponer de mayor volumen de información de sus clientes, proveedores y trabajadores.
Estoy plenamente de acuerdo con Alicia cuando afirma que el Big Data es un tema apasionante, y fundamentalmente “porqué gracias a él en un futuro inmediato dispondremos de información objetiva que nos va permitir tomar decisiones y gestionar nuestros RRHH de una forma mucho más objetiva, metódica y rigurosa”.
Sin embargo no debemos olvidarnos de que en este punto es clave reconocer que los datos no van a poder explicarlo todo y que ya como señalaba en mi post http://pauhortal.net/blog/lo-que-los-datos-no-cuentan/ “los datos no son la respuesta y ni siquiera forman parte de la pregunta” (Usman Haque) “los datos no pueden por si solos explicar el factor humano” (Mar Cabra) o por último “no todo lo que hacemos está basado en la lógica. Los datos no saben de quién voy a enamorarme en el futuro” (Gemma Galdón).
Si vuestra intención es conocer alguna de las claves sobre el concepto del big data os invito de nuevo a acceder al contenido del video http://bigbangdata.cccb.org/es/los-datos-no-cuentan-entrevistas/
El primer reto con el que nos tenemos que enfrentar en esta materia es como en todos los ámbitos de nuestra vida no es otro que el de superar los vicios adquiridos. Debemos de dejar tomar decisiones en base a suposiciones, datos subjetivos e intuición. Debemos y podemos tomar decisiones en base al análisis de datos de que ya disponemos. Es el único medio de que disponemos para ofrecer mayor valor añadido a nuestras organizaciones. Y ello es posible hacerlo de forma fácil y a unos costes insignificantes.
A modo de ejemplo y siguiendo el esquema planteado por Alicia gracias al bigdata podemos ser capaces de responder en tiempo real, y basándonos en datos objetivos a preguntas como:
¿Quién es el que tiene más capacidad de negociación en la empresa?
¿Quiénes son los que ejercen mayor influencia?
¿Cuáles son los empleados con mejor desempeño?
¿Quiénes están próximos a irse de la empresa?
¿Cuáles tienen el mayor potencial?
¿Qué está preocupando a nuestros empleados?
o simplemente ¿Cuál es el candidato mejor y más motivado candidato para ocupar una vacante?
Creo que el buen uso de herramientas como el bigdata será una de las claves del éxito en la función de RRHH y de la medida de su aportación de valor en una organización.
Recordemos que una gestión adecuada de los datos y el uso de herramientas como diana.jobs debería de darnos la capacidad para contestar de forma objetiva y con fundamento racional a la mayoría de las preguntas que hoy se formulan los directivos en el ámbito del capital humano. Y ello implica tomar las decisiones más acertadas.
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