Creo que no podemos poner en duda que la gestión del talento y la capacidad innovadora son hoy elementos determinantes del rendimiento organizativo, el éxito y el crecimiento empresarial.
Y en muchos casos, incluso, de la mera supervivencia. Además resultan claves en lo yo entiendo hoy ha de ser la función de RRHH y que muchos empiezan ya a denominar como área de Talento. Sin saber dar respuesta a las demandas internas, gestionar la innovación, y sin capacidad ni poder para asumir riesgos RRHH quedará como un mero gestor administrativo…. en definitiva algo necesario pero que aporta poco valor.
Con estos dos argumentos inicié la charla que ofrecí hace algunos días a los alumnos del Master de RRHH de la EAE en Barcelona bajo el título “Evolución del área de talento en las organizaciones”.
Desde mi punto de vista lo que hoy está ocurriendo en las organizaciones está adecuadamente analizado en una historia que Xavier Camps expone en un excelente post titulado “7 prácticas para liderar el proceso de innovación en RRHH” y al que me he referido en http://pauhortal.net/blog/impulsar-la-innovacion-desde-rrhh/
La anécdota que cuenta Xavier Camps la resumo de la forma siguiente: Imaginemos que formamos parte de un equipo de futbol con colegas de la universidad. Somos claramente amateurs que intentamos mantenernos en la mejor forma posible, aunque la edad no perdona. Un día a través de unos conocidos pactamos jugar un partido con un grupo que no conocemos. Llegado el día acordado nuestra posición de confianza (porque somos muy buenos jugando a futbol) se trunca en el momento en que al llegar al vestuario notamos que algo anda mal: los rivales miden casi dos metros, pesan 120 musculosos kilos, en vez de 11 son 15 y pretenden jugar con una pelota ovalada. Inmediatamente reconocemos que lo que pretenden es que juguemos un partido de rugby…. ¿no?
Si nunca hubiéramos visto ni oído hablar de este deporte, es probable que inicialmente lo único que pondríamos en cuestión sería (porque recordemos que somos muy buenos jugando a futbol) el número de jugadores. Supongamos que ellos admiten nuestra demanda e iniciamos el partido. Nuestra sorpresa sería mayúscula pues tras la patada inicial nuestros contrarios se iban a poner a jugar con las manos, buscan el contacto, etc. No sé muy bien lo que finalmente iba a ocurrir pero los que sabemos algo de este deporte (yo he vivido durante 25 años en Sant Boi, una de las cunas del Rugby en Catalunya y en España) es que no tendríamos nada que hacer.
Lo que pone en evidencia esta “historia” es lo que hoy estamos viviendo en las organizaciones. Creíamos saber todas las respuestas porque las preguntas eran conocidas… pero ¿ahora….?
“Antes” las preguntas y respuestas nos hablaban de Costes, (se trata es de hacer lo máximo con los menores costes –reestructuración, externalización, niveles salariales etc), Compromiso, (requiere que la gente sienta nuestros colores), Liderazgo (tenemos que hacer que nuestra estructura de dirección se olvide de la jerarquía y del poder formal y asuma otras formas de ejercer la autoridad), y Digitalización (estupenda palabreja sobre la que se ha escrito mucho en los últimos tiempos y que recordemos básicamente tiene que ver con la capacidad de transformar la información en conocimiento).
Pues bien… ¿Dónde estamos hoy y cuáles son las demandas que el CD formula al ámbito de RRHH o Talento? La primera empecemos a hablar con números y utilizando el concepto de eficiencia. En segundo termino debemos dejar de hablar de compromiso para hablar de motivación, porque puedo estar muy comprometido pero si no estoy realmente motivado. En tercer término debemos dejar de hablar de liderazgo y empezar a hablar de colaboración…..y por último ya que hemos sabido convertir ya a toda la información que disponemos en conocimiento se trata de que ahora lo usemos para innovar…. en definitiva para responder adecuadamente a las nuevas preguntas que nos formulan nuestros clientes…
Y dicho todo esto lo que creo que es pertinente hacer una reflexión sobre los hitos que desde mi punto de vista definen cada uno de los ámbitos.
- Eficiencia…. exige usar el conocimiento para fijar objetivos mensurables y analizar los resultados conseguidos con nuestra gestión.
- Motivación….nos demanda la capacidad para atender las necesidades individuales de las personas (y recordemos que no hay dos personas iguales –gestión individualizada, datos etc)
- Innovación….exige la capacidad para afrontar nuevos paradigmas ofreciendo respuestas, aceptar el riesgo y la posiblidad de cometer errores.
- Colaboración…...exige cambiar la cultura imperante en los puestos directivos, resideñar las estructuras internas y los espacios de trabajo.
Por cierto el tema del rediseño en los espacios de trabajo es un tema vital sobre el que no hemos reflexionado, creo, suficientemente, pero que resulta clave para modificar los esquemas culturales y facilitar la adopción y asimilación de los procesos de transformación y cambio.
Para terminar una mención a lo que os comentaba al inicio… recordais aquello de que hay nuevas preguntas sobre las que no tenemos las respuestas. Pues bien aqui teneis una ultima reflexión sobre los retos de futuro del área de Talento o RRHH en las organizaciones. Un área que va a ser “medida” por su capacidad de::
- Ofrecer a los empleados un buen “contrato psicológico”.
- Permitirles desarrollar sus habilidades.
- Poner en marcha sistemas de compensación equitativos.
- Usar adecuadamente las posibilidades que ofrece la tecnología.
- Facilitarles oportunidades de desarrollo.
Os parecerá que esto es muy “moderno”, muy actual… no…. pues bien estas ideas son un resumen elaborado por mí siguiendo los principios definidos por Maury Peiperl (no hoy, ni ayer… sino en el año 2000). Y aunque os parece que solo han pasado 16 años… ¡vaya 16 años! Recordar que hay muchos científicos que afirman que en los últimos 20 años hemos vivido muchos más cambios que los que el ser humano había vivido en los 2.000 años precedentes.
Por último señalar que, entre los dos deportes (fútbol y rugby). hay pocas cosas comunes pero en ambos se gana colocando una pelota detrás de una linea.
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