He escrito en otras entradas sobre cómo conseguir los objetivos profesionales y la importancia del factor suerte en el éxito personal o profesional. Hoy deseo centrarme en el concepto de actitud.
Generalmente un rasgo común en las personas que alcanzan los retos que se proponen es la de tener una visión positiva de la vida, una actitud permanente de que todo es posible, una forma de pensar en la que «todo es posible» o “lo puedo hacer”. Son personas que tienen aspiraciones y ambiciones capaces de llevarles al éxito. Con esta actitud se sitúan de manera que están expuestos a la suerte. Todos recordamos la frase de Pablo Picasso “que la suerte me pille trabajando”. No tienen miedo a encontrarse en situaciones desconocidas y nuevas para ellos mismos. Normalmente son personas capaces de recorrer el mundo, física o mentalmente, para relacionar los problemas de un lugar con las soluciones que existen en cualquier otra parte.
Son personas que tienen una percepción diferente de la realidad. Tienen una mente abierta, pero también contacto con ellos mismos, lo que implica una actitud de búsqueda permanente. Son proactivas. Al igual que las empresas que tienen éxito cambian antes que se vean obligadas a ello. Saben que pueden cambiar el futuro pero no el pasado.
Por último y esta idea reconozco que la acabo de “robar” del libro Karaoke Capitalism de Jonas Ridderstrale y Kjell A. Nordström las personas que alcanzan el éxito son las que aplican el principio de practicar, practicar y practicar. Cambiar el comportamiento requiere que pongamos a nuestro cerebro en disposición de enfocarse para el éxito y la fortuna. Ahora bien la única y mejor forma de asegurar el éxito es ensayando.
Para terminar me gustaría plantearte la pregunta. ¿Qué haces en este momento para que “la suerte” se acerque a ti?.
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